Sacha ha logrado volcar fantasmas, recuerdos y memorias en
este texto dramático, el manejo del lenguaje es exquisito, demuestra, una vez
más su sello poético. Las campesinas, seguramente, surreales y extraídas del
vuelo imaginativo y de los recuerdos del autor nos obligan a acompañarlas en su
trágica búsqueda. Los perros chocleros y las retamas ausentes nos ambientan y
nos datan la distancia de tiempo, espacio, memoria. El camino y el tiempo se
muestran como elementos análogos, al final son inevitables y resultan siendo lo
mismo. Las campesinas, saben que nunca encontrarán lo que buscan como lo
dejaron; sin embargo, viven y hacen vivir al lector su camino de encuentro con
su historia, con su pasado, con su memoria. El texto trágico se refresca con
elementos festivos, elementos que, como en toda historia, no pueden ser
eternos. Se desborda el naturalismo y el sofoclismo de Sacha nos permite evocar
a Antígona, ella, Antígona, busca enterrar, y ellas, las campesinas, buscan
desenterrar, saben que lo que buscan no están en el exterior, sino que deben
seguir las huellas de su alma, deben abrir la tierra y desenterrar lo que les
pertenece para convencer a su alma de que el tirano venció, que los niños se
volvieron hombres, que los que estaban unidos por la sangre fueron separados
por las armas. Entonado retorno es, sin duda alguna, una de las mejores obras
de dramaturgia del territorio nacional. El autor toma un pasaje histórico.
Seguramente que los que no pudieron gritar, hoy acallan sus pesares y ya no
penan más en los campos ni en las carreteras de retamas, pues con esta obra su
grito trascenderá hasta los oídos del alma.
Jorge Cabanillas Quispe
Jorge Cabanillas Quispe
Actor, director teatral y escritor